Los Husos españoles: algunas respuestas.

No sé si os lo habréis planteado alguna vez, pero resulta cuanto menos curioso que tengamos la misma hora que Alemania, por ejemplo, estando en husos horarios distintos. O que tengamos una hora más que Reino Unido cuando el meridiano de Greenwich pasa por Valencia…

En 1884 27 países firmaron en Washington un acuerdo internacional fruto de la conocida como Conferencia del Meridiano, donde se dividió el mundo en 24 husos tomando como referente el mencionado meridiano de Greenwich.

Las necesidades del comercio internacional así como las posibilidades desplegadas por  medios de comunicación y transporte a larga distancia como el telégrafo o el tren respectivamente forzaron la institución de un sistema común de horario distinto al solar sobre un territorio concreto.

Para coordinar esfuerzos y concretar entradas, salidas y otros factores relevantes en el transporte de personas y mercancías, era necesario unificar de algún modo el sistema de referencia entre un punto y otro con distinta hora solar. Si se quería viajar de Madrid a Valencia era necesario que los dos puntos tuvieran la misma hora, dada la escasa distancia y la pertenencia a un mismo país, o al menos hallar un modelo referencial con el que señalar las horas o minutos de diferencia, pudiendo así proceder a la realización de cálculos temporales sencillos. No era tanto cuánto se tardaba de un sitio a otro, como a qué hora se salía de un punto y a qué hora se llegaba, local y de origen; en cuanto a las telecomunicaciones también era propicio coordinar la fijación temporal en el momento de entablar contacto presente.

La implantación social, o mejor dicho, la asimilación por parte de ciudadanos y autoridades de estos parámetros temporales, desligando la fijación de los mismos del tiempo solar unificándolos por zonas o a nivel directamente estatal avanzó paulatinamente de la mano del desarrollo económico. A nivel internacional se procedió a la firma de estos acuerdos, pero no fue hasta el estallido de las dos guerras mundiales cuando la coordinación se hizo más intensa y efectiva.

Fue durante la segunda Guerra Mundial cuando el Tercer Reich impuso sobre Francia y Polonia el mismo huso horario que en Alemania. El régimen franquista, no sé bien en qué año, pero seguramente en torno al 40, adoptó la decisión de homologar el huso horario español peninsular con el de la Europa ocupada. Por esta razón, no sólo Francia, sino también España entraron en una zona horaria que de acuerdo con el criterio planteado a partir de Greenwich, no tenía sentido alguno.

Reino Unido continuó teniendo una hora menos, como Portugal, y por distancia y decisión nacional, las Canarias, que siempre tendrían una hora menos que la península. Derrotado Hitler, por razones que desconozco, esta situación no varió. Marruecos, por ejemplo, tiene una hora menos, a pesar de estar en el mismo huso horario geográfico que España.

El continente, desde Polonia hasta Finisterre comparte hora. Si ya nos puede parecer absurda la fijación rígida y en base a husos tan anchos (más de 1650 km en el ecuador) y sin tener en cuenta la latitud, guiados siempre por criterios políticos, y no tanto económicos, más ridículo resulta que a lo largo de casi 3000 km en latitudes europeas se tenga la misma hora numérica. (En su momento criticamos la implantación de horarios de verano e invierno por la justificación utilizada). Es un claro ejemplo en el que el ánimo interventor de los Estados distorsiona las posibles soluciones surgidas libremente en el mercado.

Saludos y Libertad!